Por lo general, se considera que el aire exterior no está contaminado con virus y, por lo tanto, no requiere ningún tratamiento adicional para su utilización en zonas ocupadas dentro del ámbito de aplicación de la norma VDI 6022. A fin de reducir al mínimo la concentración de posibles virus transportados por el aire al aire interior, se debe procurar el mayor efecto de dilución posible y, de ser posible, los sistemas deben funcionar con un 100% de aire exterior fresco.